Los primeros 100 días de gobierno de AMLO comprueban que el
fin de la corrupción es el nuevo modelo de política económica de México:
Cristina Portillo
Morelia, Michoacán, México, 11 de marzo de 2019.- Convertir
a México en una potencia económica con dimensión social y consolidar así la
Cuarta Transformación nacional, son los objetivos más importantes del gobierno
del presidente Andrés Manuel López Obrador, al cumplirse los primeros 100 días
de gobierno. Hoy, el fin de la corrupción es el nuevo modelo de política
económica de México.
En este contexto, la diputada Cristina Portillo Ayala,
reconoció que a pesar de los señalamientos de los opositores políticos al
proyecto de Morena y del presidente, durante estos primeros dos meses y una
semana de gobierno, el país se mantiene estable con variables macroeconómicas
en registros favorables: el tipo de cambio del peso es estable, la inflación
bajó, el crecimiento económico es claro a partir del número de nuevos empleos,
no hay fuga de capitales, ni salidas de empresas grandes, l ahorro de dinero
por combate a la corrupción es extraordinario, y el nivel de aprobación del
presidente y de su gobierno es absolutamente favorable.
El país no solo no está en crisis, sino que, con las
reformas constitucionales estructurales, se perfila a una estabilidad no vista
en muchos años desde los gobiernos neoliberales priístas, dijo la legisladora
de Morena.
Reconoció que la gran virtud del presidente López Obrador ha
sido la franqueza, el deseo de hacer bien las cosas con un sentido de
solidaridad y cooperativismo, y, sobre todo, privilegiar en todas las acciones
legislativas y de gobierno, el bien común más importantes: las y los mexicanos.
Portillo Ayala puso de relieve las palabras del presidente
de México en su mensaje a la Nación sobre estos primeros 100 días de gobierno:
“… reitero, reafirmo, refrendo el compromiso de no fallar. Nunca jamás
claudicaré. Antes muerto que traidor”. Esa determinación, agregó, debe ser el
principio que rija la conducta de todos los servidores públicos de México, pero
más aún, para quienes somos de Morena y que hoy teneos una responsabilidad
pública en los diferentes ámbitos oficiales.
Cristina Portillo admitió que, en Michoacán, las y los
legisladores de Morena, con su trabajo parlamentario cotidiano, van a colaborar
a la construcción de la Cuarta Transformación de México. Y aceptó lo planteado
por el presidente sobre esta nueva realidad del México transformado y
transformador: “También es reconciliación. Vamos a seguir construyendo, entre
todas y todos, la bella utopía; vamos a seguir caminando hacia ese gran ideal
de vivir en una patria nueva, libre, justa, democrática y fraterna”.
La legisladora aludió al mensaje del presidente quien aceptó
que esta Cuarta Transformación no ha requerido de una nueva Constitución, pero
sí de “…profundas reformas legales para ajustar el marco jurídico a las nuevas
realidades y circunstancias”: La Ley de Extinción de Dominio para la
expropiación de bienes que son producto de la corrupción y de la violencia, que
se destinarán al bienestar del pueblo. La modificación del artículo 19 de la
Constitución para tipificar como delitos graves y sin derecho a fianza los actos
de corrupción, el robo de combustible y el fraude electoral, entre otros. Y la
reforma constitucional para la creación de la Guardia Nacional, que tiene como
principal objetivo garantizar la seguridad pública para todos los mexicanos.
La parlamentaria de Morena comentó que, en proceso de
aprobación en las cámaras de Diputados y Senadores, también están la reforma
para eliminar el fuero constitucional al presidente de la república y que el
presidente pueda ser juzgado en funciones por hechos de corrupción y otros
delitos. Eso, dijo, es determinante para entenderla magnitud de la
transformación nacional que pretende el nuevo presidente de México.
Y a ello hay que añadir las modificaciones que establecerán
el derecho efectivo de los ciudadanos a la consulta popular y a la revocación
del mandato, además del decreto de la Ley de Austeridad Republicana que se
aprobará próximamente.
Destacó Portillo Ayala la determinación de AMLO para “…
mandar, obedeciendo”. De allí las consultas sobre el aeropuerto y más recientemente
sobre el gasoducto y la termoeléctrica del estado de Morelos. El presidente ha
dicho que es prioritario actuar siempre con respeto a la voluntad mayoritaria
del pueblo y “… acabar de una vez y para siempre con las antiguas prácticas de
manipulación, compra de votos, la intervención gubernamental en elecciones y la
falsificación de resultados”.
La legisladora michoacana destacó el tema en materia
económica del nuevo gobierno, sostenida con dos acciones elementales: erradicar
la corrupción y la impunidad para liberar fondos que puedan ser destinados al
desarrollo y al bienestar del pueblo. Andrés Manuel ha dicho: “… en eso
consiste nuestro plan económico: acabar con la corrupción, con los privilegios
y liberar fondos de esta forma para el desarrollo”.
Y las estadísticas son increíbles, señaló Cristina Portillo:
el combate al robo de combustible permitirá ahorrar este año 50 mil millones de
pesos. Ahora mismo, ya no hay lujos en el gobierno, no existen sueldos como
antes de hasta 700 mil pesos mensuales; están a la venta aviones, helicópteros
y vehículos extravagantes usados por funcionarios públicos. Ya no se rentan
oficinas de lujo y nadie tiene servicio médico, cajas de ahorro y seguros
privados con cargo al erario. Se acabaron los privilegios de la burocracia
dorada. Esto permitirá que el presupuesto rinda mucho más, explicó.
Con estas acciones para detener la corrupción, solo en
adquisiciones, el gobierno federal calcula un ahorro de 200 mil millones de
pesos.
En materia de combate y destierro de la corrupción, se
evitarán fugas por 300 mil millones de pesos. Y el plan de austeridad liberará
fondos para el desarrollo por 200 mil millones de pesos, indicó.
Portillo Ayala refirió que el presidente informó esta mañana
que se dispondrá de una bolsa adicional para lo que se necesite, de 700 mil
millones de pesos solamente durante el presente año. “Eso es sensacional”, dijo
la legisladora.
Y concluyó al destacar el plan macroeconómico del presidente
Andrés Manuel López Obrador: ya no hay necesidad ahora de “… alterar, ni lo
haríamos bajo ninguna circunstancia, los equilibrios macroeconómicos. Nunca
gastaríamos más de lo que ingresa a la hacienda pública ni tampoco nos
endeudaríamos para financiar el presupuesto”.
Para Cristina Portillo Ayala, igual que para el presidente
López Obrador y analistas financieros y políticos nacionales e internacionales,
consideró que en este período de 100 días de gobierno se ha confirmado que, si
se destierra la corrupción y se gobierna con austeridad, se puede obtener más
crecimiento económico. El fin de la corrupción es el nuevo modelo de política
económica de México, subrayó convencida.