Primordial fortalecer Federalismo para garantizar pesos y contrapesos entre Poderes: Mónica Valdez

 Primordial fortalecer Federalismo para garantizar pesos y contrapesos entre Poderes: Mónica Valdez

-La situación por la que atraviesa el país, hace urgente que la unión de fuerzas tendientes a generar acciones que favorezcan las decisiones plurales por encima de las de imposición.

En México hoy más que nunca, resulta primordial fortalecer el Federalismo garantizando los pesos y contrapesos entre los Poderes y los órdenes de gobierno, recalcó la diputada Mónica Valdez Pulido, integrante del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en la LXXV Legislatura del Congreso del Estado.

La diputada por el Distrito de Zacapu recalcó que la situación por la que atraviesa el país, hace urgente que la unión de fuerzas tendientes a generar acciones que favorezcan las decisiones plurales por encima de las de imposición.

“Nos encontramos en una situación de alerta nacional, frente a las posturas totalitarias, polarizantes y contrario al régimen democrático que por años y con mucho esfuerzo hemos construido en México, por eso es urgente que la ciudadanía tenga mayor capacidad para influir en las decisiones del país, comenzando por aquellas que inciden en la calidad de vida de la gente, con un gobierno de la ciudadanía y no uno del Presidente de la República”.

Mónica Valdez destacó la necesidad de un esquema que permita el avance nacional a través de la construcción de una ciudadanía fuerte, crítica, informada y participativa, no confrontada o polarizada, como ha sido la apuesta del Gobierno Federal en turno, ya que la participación ciudadana es la vía para el cambio en México, cuya base sean las personas opinando, incidiendo y decidiendo.

“Hay que empoderar a la sociedad y abrir mayores espacios para la participación ciudadana en la vida pública, tanto en la toma de decisiones como en la vigilancia del cumplimiento de las metas de gobierno”.

Asimismo la legisladora recalcó la necesidad de acotar el presidencialismo imperante, que hoy evidencia su rostro más dañino para el país, apostando por una distribución efectiva del poder y mejores mecanismos de control entre los tres niveles, así como en las relaciones entre las regiones y la federación.